Cronología del salto

Tu entusiasmo al descubrir la plazoleta...












...descubrir los dos niveles del círculo central...

...ver que podías saltar como en la cama...

...con la diferencia que luego del vigésimo octavo salto, el aterrizaje no fue el apropiado y la manga de mi chaleco verde debió contener tu sangre nasal.

Bombero mañoso

Sólo querías tu casco y partir a los juegos donde el día antes habíamos corrido antes de almuerzo.
El rojo emblema bomberil se caía una y otra vez, y una y otra vez lo levantabas para ponerlo en tu cabeza.

Eso de las mañas te viene en estos genes, sí, lo sé.